Nagash, ahí es nada...

He aquí una figura mítica donde las haya. El mismísimo Nagash en carne y hueso, bueno, más bien en hueso y punto.

Este personaje del mundo de Warhammer era el no va más de los personajes especiales, tanto que ya no existe como tal. He de reconocer que no me acuerdo muy bien de la historieta que rodea al tipo este. Solo se que tenía su cierto carisma y era ultrapoderoso, con reglas de esas que se les va la olla a los diseñadores del juego.

Tengo entendido que la miniatura de Nagash fue la primera que encargaron a Gary Morley, y por la cual en una entrevista reciente ha pedido perdón (y por su muy irregular trabajo en Blood Bowl). Lo de la entrevista me lo contó Johan y no pongo en duda su saber friki.

A mi no me parece como para pedir perdón. Vale que sea el superpersonaje de los no muertos y que todos los frikis esperen una autentica joya, pero ahí tenemos a Griff Oberwald, que aun no tiene una miniatura digna (ah, que la primera tambien era de Gary Morley...). Tambien los dibujos de Nagash del trasfondo prometían mucho, pero luego hay que plasmar eso en una miniatura. Quizá fue eso lo que le perdió al joven Morley.

Pero a mí me gusta. Puede ser por nostalgia o por debilidad pero me resulta chula y ha sido agradable pintarla. Lo peor sin duda la zona de la cintura porque los adornos no están bien marcados y puede que sea lo peor de la miniatura. Esto ha sido un encargo y me pidieron que la pintase a la manera "oficial" así que he copiado que supongo que haría Mike McVey en su día. Esta manera tan colorida de pintar ha caído en desuso pero opino que tiene su punto en las miniaturas de fantasía.

Las calaveritas han sido sencillas y rapidas de pintar. Primero de blanco y luego con un lavado de marrón y detallitos en blanco deslucido.



El degradado de la espada tampoco resultó complicado. Y ahí he de reconocer que las fotos me han hecho un favor porque el rojo no es tan intenso en la realidad. En la foto me parece que queda chulisimo.

No me quedaba claro si las manos son de hueso o de carne así que las he pintado en plan mortecino con un base verde clarito e iluminando hacia hueso deslucido, por si resulta que eran de hueso.

Poco más que reseñar. La composición de la foto del templo está hecha con una foto de un escenario que vende Games Workshop. Nuevamente lo uso sin permiso y espero que nadie se ofenda. Total no saco un clavel de este blog. Y ahora me toca a mí pedir perdón porque la composición tira a bastante chapucerilla si uno se fija minimamente.

El gran dictador

Saliendo de la dinamica gamesworkshopera, más bien cuarentamilera, voy a poner una figura de 54mm de Andrea Miniaturas. Ellos la llaman "Master of the world" y es una miniatura de Charles Chaplin en una escena mítica de "El gran dictador" en la que el susodicho, como Astolfo Hinkel, juega con una bola del mundo hinchable con fondo musical de Wagner.

Tenía miedo de que no vienera la bola y tuviera que buscarme la vida, pero si que venía y, la verdad, no se que habría sido peor porque montar la bola de marras se las trajo.

Venían dos semiesferas de plástico transparente que había que recortar del troquel y pegar a un aro de metal con unos rebajes en los que encajaban las semiesferas. Por ahora todo bien. Pero sobra casi un milimetro de plomo en todo el radio del aro que hay que limar con soberana paciencia y luego comprobar con horror que uno ha sido chapucero al cortar las semiesferas lo que produce muchas irregularidades a lo largo de la juntura. Se apaña como uno puede las irregularidades, la cola blanca usada como masilla funciona bien para cubrir pequeños huecos y escalones de estos. Hasta que uno acaba harto y decide que ya está bien (luego nunca está tan bien).

El montaje del resto no tuvo mayor complicación, menos mal.

Para imprimar pegué la bola con blue tag porque quería pintarla por separado. Hasta para la imprimación dió problemas la bola de marras. La pintura no se secaba y se iba escurriendo haciendo pequeñas olas de forma que no hubo manera de que quedase una capa uniforme. Pero bueno, luego lo arregle más o menos con la pintura final.

Y lo que había supuesto como más dificil, que era pintar un mapamundi en la bola, luego no lo fue tanto. Basto con pintar las latitudes y longitudes y luego digujar con lapiz el mapa, copiado de un patron que venía con la miniatura. Despues se pinta de negro y se corrige con cuidado con el gris. Aproveché tambien para dar una capa de gris aguado sobre las lineas de longitud y latitud, que habían quedado demasiado marcadas.

La miniatura en si no tiene mayor complicación dado que es casi entera uniforme. La cara si me trajo algun quebradero que otro. Sobre todo los ojos, que tuve que repintar varias veces y que aun así no han quedado nada bien. Es una pena porque el escultor se salió con la expresión de la cara de la miniatura.

Descubrí que el bigote chaplinesco es más triangular que el hitleriano.

Lo último reseñable es el suelo. Es mi primera tentativa de pintar efecto de mármol. Aunque visto de cerca se nota que esta pintado y se distinguen los brochazos es toy muy contento con el efecto de lejos, que ha quedado muy realista. Importante dar unas capas de barniz brillante para un efecto más realista.
















Por último un jueguecillo para practicar un poquillo con el photoshop. Busqué en la web una imagen de algun momento de la escena de la película. Despues me tomé mi trabajo en hacer desaparecer al Chaplin original. Para ello recurrí basicamente a corta pega de zonas similares y luego al siempre util "clone stamp" para suavizar y engañar un poco al ojo. Eso sí, el apaño no engaña a nadie visto en el tamaño real pero para el tiempo que me llevó he quedado bastante contento.

Txus artista invitado: buggy orko

Txus ha tenido la amabilidad de enviarme unas fotos de un invento suyo. Algo tan bizarro no puede quedarse en el limbo de lo desconocido así que la mostramos al mundo (a la mínima parte de él que se asoma por este blog).

Se trata de la creación de un buggy de guerra orko a partir de un modelo "serio" de coche de juguete (que nadie se ofenda, no se como se les llama en el argot especializado). La idea me parece muy buena y me recuerda al mundo primigenio del hobby games workshop en el que incluso en la white dwarf te animaban a hacer estas cosas.


Lo más bizarro de todo el set es sin duda el tripulante. Ni corto ni perezoso ha mutilado al pobrecillo hombrecillo de juguete del mundo civilizado de los juguetes estandar y lo ha convertido en una aberración.

Sin duda este sería el orko más deforme de toda la orkidad. Y además empuña una catapulta shuriken eldar. Este pobre hombre está condendado a ser un lone warrior de por vida! Junto con el guardia Marbo!





El chasis lleva algun añadido de algun kit citadel de fantasy. Lo que le da un aire más macarra y "orko" aunque de dudosa funcionalidad (o sea, orko).

Me queda alguna duda respecto a la escala del cacharro. A juzgar por el tamaño del tripulante antes de pasar por el quirófano de un matasanos orko es bastante grande.

Pero como estas pegas son las que realmente hacen tan mofos al invento este a quien le importa! Txus, por favor, haz más cosas de estas!

Más poses para guardianes eldar

Continuando con el tema anterior, aun me quedaban unas cuantas poses por mostrar.

Guardian inspeccionando el terreno o buscando las llaves del coche... Piernas avanzando, torso girado un poco hacía atrás, brazos y arma caídos y cabeza girada hacia un lado y hacia abajo.














Guardian recargando el arma. Queda mejor con piernas estáticas, levantando en lo posible el brazo del arma buscando una posición para que el brazo izquierdo encaje con el cargador del arma.














Disparando a la alto. Piernas reculando, para elevar el arma poner lo más alto posible el brazo izquierdo. Si se tira la cabeza hacia atrás la pose queda como más macarrila.















Disparando desde el suelo. Esta pose es una conversión. Requiere partir las piernas, una por encima y la otra por debajo de la rodillera y rellenar los huecos con masilla. Además como las piernas no van el la posición para la que han sido diseñadas hay que hacer un apaño limando el plástico y añadiendo masilla para rellenar para conseguir un buen culito prieto elfico.

Un truco para ahorrar trabajo en esto es pegar encima el cinturoncito de las granadas y cargadores de forma que no se vea si el apaño está chapucero. Evidentemente es lo que yo hice.

Vuelvo a decir que para jugar todo este trabajo se desperdicia un poco, por lo menos en las batallas grandecillas en las que las miniaturas se apelotonan.